Un día me di cuenta de que dormía sobre un montón de basura.
No, no vivo en un estercolero, es una cama como otra cualquiera.
Solo que me di cuenta de que justo debajo de mí, guardaba todo aquello que no quería ni mirar…
Desde que duermo sobre aire (y alguna pelusa) descanso de verdad
En todo lo que nos rodea existe una parte de orden y una parte de caos
A menudo decimos que alguna situación o alguna cosa nos da buen rollo o mal rollo como si las cosas en sí tuvieran alma propia, pero ¿Qué queremos decir realmente? ¿Qué sentimientos hay detrás de esta expresión?
Algo da buen rollo cuando da buenas vibraciones, es ordenado, positivo, agradable, alegre…
Algo da mal rollo cuando es árido, apagado, ruinoso o caótico
Hablábamos en el capítulo anterior sobre qué era el Chi y que es algo está en todo y en todos nosotros, como un coreógrafo del tiempo y el espacio.
Evidentemente esta coreografía del mundo tiene danzas positivas y negativas, alegres y tristes, vibrantes y aburridas…
Todo eso también es el Chi
Pero en sus diferentes aspectos o fases
Si hablamos en términos de Feng Shui y su estilo poético, el Chi puede dividirse en 2 conceptos subyacentes a él, que son Sheng Chi y Sha Chi
El Sheng Chi es la energía creciente, el buen rollo, la vida, la serenidad, la alegría, la armonía
El Sha Chi es la energía caótica, el mal rollo, la muerte, la decadencia, la tristeza, el desorden
A casi todo el mundo le gusta un parque con árboles y flores, quizás oir agua discurriendo por un riachuelo o una fuente.. el ambiente cálido pero no caluroso, el sonido de los pájaros…
Todo eso es Sheng Chi
Un niño creciendo, una planta floreciendo o una ardilla subiendo a un árbol son sucesos agradables y sanos, muchos de ellos crecientes hacia arriba en el sentido literal
Por contra a casi nadie le gusta pasar el rato en un descampado árido, con escombros, en oscuridad y con deshechos industriales.
Todo eso es Sha Chi
La muerte siempre es dolorosa o triste, la contaminación ambiental o el desorden en casa son sucesos caóticos, que ponen nerviosa, que incitan al miedo o al desasosiego, muchos de ellos en sentido descendente literalmente hablando, como el hecho de enterrar a alguien en el suelo, marchitarse una flor o la lluvia ácida
Por suerte ningún espacio en el que habitamos o en nuestra casa es completamente sheng o completamente sha, sino todo nuestro entorno tiene una combinación de ambos.
Cuanto más sheng haya en nuestro entorno, mejor nos sentiremos, ya que el entorno influye en nosotros de igual manera que influimos en el entorno.
Si esto ocurre, el Chi entrará en tu casa e irá impregnándose de todo aquello positivo que tengas, irá en ascenso, inundará todo lentamente de un ambiente sereno y sano porque estará potenciándose el lado Sheng de su existencia
Cuanto más Sha tengas, peores sentimientos emanarán de tu alma. El entorno también influye de manera negativa en tí y en los tuyos.
El Chi entrará en tu casa y se topará con desorden y caos que le impedirá fluir por ella y llegar a todas las estancias. El Chi estará estancado, enfadado.
Allá donde no puede llegar correctamente el Chi, todo se muere y se agota.
¿No lo crees?
Mira esta imagen de una oficina cerrada… es asoladora
Piensa también en una casa abandonada, donde hace años que nadie habita su espacio. La puerta de entrada no se abre habitualmente y por tanto el flujo de Chi no entra, sino que permanece aquel que quedó atrapado en la casa. No hay vida, no hay futuro
Párate a pensar por qué en los lugares en ruinas las cosas están rotas… ¿Han sido sólamente los vándalos?
No sólo ellos
Piénsalo… a veces en casas donde nadie habita las cosas se rompen aunque no se usen y no necesariamente ha sido alguien que haya entrado sin permiso
Te invito a mirar a tu alrededor en la estancia en la que estés ahora mismo ¿Encuentras rincones sheng o sha? ¿Hay algún objeto que te inspire especialmente sheng chi o sha chi?
Identificar aquello que te da buenas sensaciones y aquello que no te las da es el primer paso para conseguir un entorno agradable y tranquilo en casa.
Parece una tontería, algo casi obvio evaluar qué te gusta y qué no en tu casa, pero entonces… ¿Por qué no lo has hecho antes?
Ahora es tu momento, no lo dejes pasar… identifica dónde tienes Sheng Chi o Sha Chi en casa y tu visión sobre las cosas comenzará a cambiar.
EL ENTORNO INFLUYE EN TÍ MÁS DE LO QUE CREES
¿Te has parado a pensar por qué hay gente a la que le encanta que su sofá sea rojo y otra a la que le horroriza?
¿Sus ojos detectan el color de manera diferente?¿Es algo cultural?
La respuesta es NO en ambas preguntas
Es verdad que hay un cierto componente de culturalidad en el mobiliario de una casa pero incluso dentro de la misma cultura, el mismo país y el mismo entorno, encontrarás gente a la que le gusta un determinado color o estilo y gente a la que no.
También es cierto que las mujeres y los hombres percibimos los colores de manera ligeramente diferente. Esto se debe a la cantidad de células “cono” y “bastón” de nuestra retina, sin embargo, dentro de las mujeres o de los hombres encontramos discrepancias en gustos sobre los colores o las formas.
Entonces, ¿Qué hace que me guste o no me guste un tipo de decoración?
La personalidad
Una casa no vive sola.. generalmente tiene habitantes
Los habitantes influyen en la casa y la casa en los habitantes, es una simbiosis entre el espacio y la persona.
Igual que mi personalidad influye en mi salón a través de los muebles, pintando las paredes, etc… el salón influye en mí cuando habito en él: Me genera emociones.
Un salón desordenado me hace estar inquieta
Un salón ordenado me invita a la paz
Un salón con las paredes rojas me resulta acogedor y calentito en invierno
Un salón con las paredes rojas me da sensación de agobio y calor en verano
Ojo, a mi… quizás a ti no…la personalidad es la clave
Ahora que ya somos mas conscientes de que el entorno influye en nosotros y que nosotros influimos en el entorno.. ¿Cómo podemos usarlo para vivir en armonía?
Para esto voy a utilizar 2 conceptos del Feng Shui (y de muchas otras variantes y disciplinas chinas) que es el YIN y el YANG
Cada uno de estos dos conceptos tiene muchísimos sinónimos en nuestro lenguaje occidental, dependiendo del contexto en el que estemos, sin embargo el significado profundo de cada uno siempre es el mismo y engloba todos esos sinónimos que nosotros necesitamos.
Si hablamos de personalidades…
Una personalidad YANG es dinámica, suele ser extrovertida y activa.
Una personalidad YIN es tranquila, sosegada, introvertida
Si hablamos de decoración…
Una decoración YANG tiene colores vivos,los colores son definidos y contrastan entre ellos.
Lo mejor es ver algunos ejemplos de diferentes estilos de decoración YANG para que puedas hacerte una idea más concreta de lo que hablo:
Si te fijas en este ejemplo, la decoración es un poco retro años 70, con líneas básicas y rectas. La decoración es sencilla pero da sensación de vida, de estímulo.
Esta podría ser por ejemplo una sala de espera de un abogado, en el que la gente llega triste o preocupada. Una decoración tipo YANG puede generar optimismo, dinamismo, motivación… muy útil a la hora de conseguir que te contraten como abogado de sus causas, ¿no?
Aquí tienes otro ejemplo de decoración YANG en otro ambiente completamente diferente:
Como ves, este salón tiene un estilo radicalmente distinto a la imagen anterior, es muy clásico y combina telas estampadas de varios colores.
Este salón YANG puede ser estupendo para una persona más bien tranquila o reservada, o que tenga un trabajo individual o puramente intelectual, como un escritor, por ejemplo.
La decoración YANG aporta a este tipo de personas la sensación de recargar pilas cuando están en la habitación.
Una persona activa, dinámica o nerviosa, se pondría más nerviosa aún en este salón (es en parte lo que me pasa a mí personalmente) pero si observas la imagen es bonita y armoniosa, la quiera o no para mi casa. Nuevamente es la persona la que marca la decoración de su casa.
Ahora vamos a ver la situación contraria, en la que veremos ejemplos de decoración YIN:
Una decoración YIN tiene colores pastel, tonos neutros y los colores se coordinan suavemente
Este comedor es un buen ejemplo de decoración YIN, que no tiene por qué ser de color blanco necesariamente, sino que tiene más que ver con utilizar la misma gama de colores o tonalidades parecidas, para dar un aspecto sereno e íntimo a la habitación
Otro ejemplo de decoración YIN en otro estilo completamente diferente:
Igual que antes, toda la habitación está decorada con pequeñas variaciones sobre los tonos tierra y dorados predominantes. En este caso es un salón sobrio, sin demasiada decoración, que invita a leer o a meditar.
Todo esto que hemos visto en decoración sobre YIN y YANG no debe ir solo, sino que debe ir unido siempre a quienes viven allí.
Hemos visto antes un salón YANG en el que posiblemente, si fuera el del salón de tu casa, te resultaría agradable o estresante según tu propia personalidad
Y esta es la clave principal, tu personalidad
Pensemos en una persona YANG (dinámica, activa)..
¿Qué necesita cuando llega a casa?
Justamente lo contrario a lo que es… una decoración YIN para relajarse.
Ahora tenemos una persona YIN (tranquila, introvertida)
Si le doy una decoración también YIN se volverá lánguida y triste
Cuando llega a casa necesita estímulo, recargar pilas…
Necesita una decoración YANG
Casi siempre la decoración de la casa propia se hace de forma intuitiva, siguiendo los gustos personales y si algo “queda bien” o “queda mal” aquí o allí.
La realidad es que nuestro subconsciente está eligiendo lo que nosotros vamos necesitando, el gusto es una proyección de las necesidades propias en los muebles, las paredes, las cortinas, etc… de nuestro hogar.
Curioso ¿Verdad?
Como ejercicio de esta semana piensa qué personalidad tienes tu y si tu salón o tu dormitorio están acordes con la decoración que necesitas…
¡A lo mejor te sorprendes!
Nos vemos en el siguiente capítulo “El quinto elemento”